¿Y si la ciencia moderna se originó en la Ruta de la Seda?

¿Y si la ciencia moderna se originó en la Ruta de la Seda?

En una de sus obras más sorprendentes, Warriors of the Cloisters: The Central Asian Origins of Science in the Medieval World,  Christopher Beckwith, como el título de la obra indica, propone que la ciencia moderna, la ciencia occidental debe su origen a una serie de iniciativas culturales que se desarrollaron en la Rota de la Seda, principalmente en el antiguo reino de Bactria, ahora fuera de la frontera china, en el territorio de Tayikistán. Las dos instituciones a las que se refiere son las universidades originales, como centros de trasmisión continuada del conocimiento entre ciudadanos específicamente dedicados al estudio, y el método del argumento recursivo, que fue el método científico de la Edad Media en Europa. Ellas se crearon en los tiempos en los que los reinos de la Ruta de la Seda eran importantes centros de estudio y debate budista, siendo adaptados luego en lo posible, a la sociedad creada tras las invasiones musulmanas, y transmitiéndose a Europa antes de desaparecer en su lugar de origen debido a la presión religiosa.

Beckwith asegura que la ciencia moderna desciende directamente de la ciencia medieval, y que ésta a su vez experimentó una revolución cuando, bajo influencia árabe, llegaron a Europa las dos mencionadas instituciones científicas.

En cuanto a las instituciones de enseñanza superior, asegura que a pesar de los autores que consideran al “college”, precursor de La universidad, como una entidad que se desarrolla en Europa de forma autónoma, no hay indicios de la existencia del mismo antes de que se fundara el primero en París en el año 1180, por una persona que volvía de las cruzadas en Jerusalén. Ese viaje de vuelta que le habría obligado a atravesar Siria le habría puesto en contacto con las madrasas islámicas, auténticos centros de enseñanza en aquella época específicamente orientados al estudio y manutención de los estudiantes. Por otra parte es ya sabido que las madrasas islámicas se habían originado en la Ruta de la Seda unos siglos antes, y que su estructura arquitectónica, su función y su integración en la sociedad como un todo y en el mundo del saber en particular, son herederas de las viharas budistas, asimismo creadas en estas mismas tierras. Cuentan las crónicas que cuando se fundaba una vihara se le asignaban una aldea y sus habitantes para su sustento.

En cuanto al método del argumento recursivo, su origen, indudable en esa misma área geográfica, es dudoso en cuanto a su genealogía intelectual. Beckwith considera que pudo haber tenido influencias de la antigua filosofía griega (no olvidemos que durante siglos estas tierras fueron gobernadas por los reinos helenistas que sucedieron a las conquistas de Alejandro Magno), así como concepciones filosóficas locales. Como señala Beckwith «La gran importancia del método para la ciencia es su estructura formal y manifiesta, su característica más destacada, que impulsa al autor a examinar una cuestión desde todas las direcciones, incluidas las hipotéticas, llamando la atención sobre lo desconocido y fomentando la especulación sobre posibles soluciones alternativas a los problemas».

La última parte de su libro la dedica a analizar las razones por las que, siendo ambas instituciones también conocidas en el mundo árabe, India y China, sólo generaron una revolución del pensamiento en Occidente, que respondería a la aplicación de las ideas científicas propuestas por Aristóteles,  rescatadas del olvido algunas y comentadas otras por los filósofos árabes, como Avicena, que llevaron a una actitud científica ante todos los acontecimientos del saber, y a su vez al desarrollo de la ciencia moderna.

Si ya desde hace algunas décadas se ha puesto de manifiesto la importancia que tuvieron los reinos de la Ruta de la Seda en el desarrollo cultural de China, primero en la transmisión de la cultura del bronce y la domesticación de los bóvidos y óvidos desde Occidente, luego en la transmisión de un budismo, que ya no es hindú sino centro asiático, y más tarde en la transmisión de tradiciones artísticas, desde la pintura y la escultura a la música y el teatro, desarrolladas localmente, este ensayo de Beckwith invita a reevaluar la importancia que tuvieron este conjuntos de reinos pequeños pero no aislados, en el desarrollo de las grandes culturas de nuestro planeta: en concreto la de China, India, el Mundo Árabe y Europa.

Para saber más: Beckwith, Christopher. Warriors of the Cloisters: The Central Asian Origins of Science in the Medieval World. Princeton University Press, 2012.

LIBROS

Más artículos sobre viajes a china

Las artimañas de Beijing, la capital imperial
Las artimañas de Beijing, la capital imperial

Las artimañas de Beijing, la capital imperial Según las describe Ji Xiaolan[1], en uno de sus cuentos que intenta reflejar la vida en China durante el siglo XVIII. Ningún lugar puede igualar a la capital imperial en engaños e imposturas. Una vez compré dieciséis...

Gloria de Xian en la dinastía Tang
Gloria de Xian en la dinastía Tang

Gloria de Xian en la dinastía Tang Todo visitante a la ciudad de Xian ha escuchado decir que la ciudad alcanzó su máximo esplendor durante la dinastía Tang, pero dado que hoy en día apenas quedan de esa dinastía la Gran Pagoda de la Oca, la Pequeña Pagoda de la Oca y...

10 actividades que no hay que perderse en Jianshui
10 actividades que no hay que perderse en Jianshui

10 actividades que no hay que perderse en Jianshui Dormir en un hotel antiguo. La ciudad no sólo cuenta con un buen número de zonas antiguas, sino que en los últimos años el gobierno local ayudó a la restauración de 10 hoteles en casas antiguas, lo que convierte a...

Más artículos sobre cultura china

Más reflexiones sobre el veneno gu
Más reflexiones sobre el veneno gu

La enfermedad gu era el resultado de una contaminación por veneno gu, que un analista reciente ha caracterizado como "un espíritu maligno extraño que entraba en [el] cuerpo y se desarrollaba en gusanos o algún animal similar que roía los intestinos o los genitales"....

Puede que el Chino no sea el idioma más hablado de la tierra
Puede que el Chino no sea el idioma más hablado de la tierra

Puede que el Chino no sea el idioma más hablado de la tierra Desde que tengo uso de razón he escuchado que el chino es el idioma más hablado de la tierra, y siempre he pensado que era verdad. Pero buscando algunos datos sobre el asunto me he quedado sorprendido que...

El Polo en la China antigua: deporte de emperadores
El Polo en la China antigua: deporte de emperadores

El Polo en la China antigua: deporte de emperadores 1.Polo, un deporte de emperadores Cualquiera que se haya acercado al arte chino, y especialmente al arte de la dinastía Tang se habrá visto sorprendido por la multitud de imágenes de jugadoras de polo. Mujeres nobles...

Más artículos sobre las minorías de China

Anochecer en Dali
Anochecer en Dali

Sin palabrasLa Calle Fuxing desde la Puerta del Sur. Dali. Yunnan.  Tiendas en la esquina de la calle Fuxing. Dali, Yunnan.Visión del Mercado Noctorno al exterior de la Puerta Sur. Dali. Yunnan. Últimos artículos

Los cinco templos secretos de los lamas en Lijiang
Los cinco templos secretos de los lamas en Lijiang

Los cinco templos secretos de los lamas en Lijiang Religiones de Lijiang Aunque la ciudad de Lijiang es conocida fundamentalmente por la religión Dongba que practicaban los chamanes tradicionales de los Naxi, también llamados Dongba, que con sus rituales administraban...

El culto a los Señores de la Localidad de la minoría Bai
El culto a los Señores de la Localidad de la minoría Bai

El culto a los Señores de la Localidad (benzhu) es el más característico de los Bai que viven en la Prefectura de Dali. Su vida religiosa está centrada en torno al templo benzhu de cada aldea, pues cada aldea venera a un señor de la localidad, a veces fue un personaje...