Matrimonio de los Li

Tienen tres tipos de matrimonio:

El matrimonio de la espesura, en el que los jóvenes se conocen y se van a la espesura a cortejarse, por la noche el chico va a casa de la chica, y así durante un tiempo, si luego deciden casarse, pide a un intermediario que pida a su mujer.

En la aldea: Cuando se celebra una boda, los jóvenes de las aldeas cercanas se reúnen en la fiesta. Allí hay muchas oportunidades de conocerse, y entre cantos y adivinanzas algunos se van enamorando, y se separan del grupo. Luego, los días siguientes el chico enviará un intermediario a pedir la mano.

En el Fangliao: Los hombres se disfrazan y van a "la casa de las doncellas" En la puerta cantan: "Abre la puerta", la chica a su vez le responde cantando la canción: "No quiero" o "pasa", y el chico actúa siguiendo sus órdenes. La chica canta "Siéntate" y él la "Canción de agradecimiento". Luego él canta "A que vengo", y ella, si sigue interesada por él, "Bienvenido". Según van intimando él cantará "Probar el amor" y ella "Tirar del amor". Y así tras la primera cita noche tras noche se reúnen en los cultivos y se "Acuestan en el campo", y el amor va progresando hasta que deciden casarse. Esas "Casas de las doncellas" son una característica de los pueblos Li, y de otros pueblos de tierra firme. Los jóvenes de ambos sexos, al cumplir los 13 años, se construyen con sus amigos, unas casas de bambú un poco alejadas de la aldea, donde se reúnen solteros y casados que aún no viven con el cónyuge, y cantan, y se cortejan, disfrutando de una gran libertad sexual. Los chicos visitan a las chicas en esas casas, generalmente de otras aldeas. Estos encuentros raramente acaban en matrimonio. Las relaciones duran poco, cambiándose con frecuencia de pareja, y ni se discrimina a los hijos naturales, ni a las madres solteras, al revés estan más valoradas ya que los hijos pertenecerán al marido legítimo

También practican el llamado Amor robado, que es diferente en cada rama.
No se casan con gente del mismo clan. Cuando lo ajustan desde la niñez de los novios, intervienen casamenteras y están atentos a los signos auspiciosos. Muy común era la adivinanza por los huesos de pollo, en el que se observaban los agujeros de los dos fémures de un pollo servido en banquete, la suma total debía de ser par, sino, se deshacía el compromiso. La dote eran búfalos, de 2 a 5 según la riqueza. El gasto que esto llevaba hacía que se adoptaran yernos, campesinos pobres que si no, no podrían casarse. Otras veces el marido se quedaba en casa de la mujer hasta pagar con su servicio la deuda de la dote. Muchos casados aprovechaban las ausencias del cónyuge para mantener relaciones sexuales, y otros acababan en divorcio, como la mujer que se quisiera divorciar debería devolver los regalos, eran siempre los hombres los que lo pedían. Tras el divorcio los hijos quedaban en la casa del padre, excepto los lactantes, que estaban con la madre, pero mantenidos por el padre. Las viudas gozaban de libertad de segundas nupcias. Todo esto acabó en los años 50, cuando el Partido Comunista tomó el control de sus territorios.

Boda: Los amigos del novio recogen a la novia, que es llevaba a casa del novio haciendo ceremonias para espantar a los demonios. Tras la noche la novia vuelve a casa de los padres. Va volviendo a casa del marido hasta quedarse allí, cuando hay noticia de embarazo el marido construye una nueva casa y ya viven juntos.

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